El antiguo poder curativo de la cúrcuma
Si alguna vez has cocinado comida india, probablemente estés acostumbrado a ver la cúrcuma en las listas de ingredientes. Es esa especia finamente molida que le da al curry su color naranja amarillento. Pero quizá no sepas que se ha usado con fines medicinales para tratar desde pequeñas heridas hasta artritis reumatoide desde el siglo VIII a. C.
Y, como la mayoría de las plantas y especias sobre las que hemos escrito a lo largo de los años , la cúrcuma también tiene una increíble variedad de beneficios cuando se usa en el cuidado de la piel.
Potente antioxidante
La cúrcuma es quizás una de las especias más polifacéticas que existen. Lo que le confiere sus propiedades curativas dinámicas es su ingrediente activo: la curcumina.

La curcumina es un antioxidante extremadamente potente, lo que significa que es eficaz para combatir los procesos que causan los signos del envejecimiento. La oxidación causada por la radiación ultravioleta de la exposición solar, los radicales libres en el aire y la suciedad/residuos que encontramos a diario deterioran lentamente la estructura de la piel al erosionar el colágeno a nivel celular.
Los antioxidantes detienen activamente ese proceso y evitan que continúe, retardando así la descomposición del colágeno y previniendo los signos del envejecimiento.
Potentes propiedades antiinflamatorias
La curcumina también es conocida por su capacidad para aliviar la inflamación, de ahí su uso en el tratamiento de la artritis. Sin embargo, sus propiedades calmantes son innegablemente poderosas cuando se usa para tratar la piel hinchada o descolorida.

La inflamación se produce cuando el cuerpo detecta sustancias extrañas y libera glóbulos blancos en las zonas afectadas. En general, es beneficioso, pero cuando se convierte en un problema crónico y el cuerpo empieza a atacarse a sí mismo sin motivo, es necesario tratarlo con un antiinflamatorio.
La curcumina es tan eficaz como algunos medicamentos antiinflamatorios recetados, por lo que es increíblemente capaz cuando se trata de aliviar áreas problemáticas de la piel.
Cicatrización de heridas
Debido en igual medida a sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antibacterianas, la cúrcuma es un cicatrizante perfecto.
Desde las molestas cicatrices del acné hasta la recuperación de una exfoliación, la cúrcuma no solo mantendrá las áreas afectadas limpias y libres de bacterias, sino que sus propiedades antioxidantes aumentarán la velocidad y la eficiencia del proceso de curación.
Aclaramiento de la piel
Esto puede parecer extraño debido al tinte amarillo de la cúrcuma, pero en realidad es una forma fantástica de emparejar las manchas oscuras en la piel.
Al utilizar sus propiedades antiinflamatorias, junto con su capacidad para estimular la circulación, la cúrcuma es conocida por su capacidad para disminuir la ojeras y la hinchazón.
RECOMENDACIONES PARA EL CUIDADO DE LA PIEL
La mascarilla mineral hidratante BIO
La cúrcuma es el ingrediente clave de este tratamiento galardonado con el premio Aestheticians' Choice. Combinada con oro y plata coloidales, minerales como zinc, cobre y magnesio, y centella asiática, esta mascarilla hidratante es la mejor manera de restaurar la salud de la piel y, al mismo tiempo, aportarle un brillo hidratado. Además, gracias a sus potentes propiedades antiinflamatorias, fue formulada pensando en la piel seca e hipersensible.
La línea BB Conceal
Estos tres correctores (Rosa, Trébol y Caléndula) aprovechan el poder de la cúrcuma no solo para disimular posibles problemas de la piel, sino también para corregirlos. Cada corrector aporta una ventaja única:
La rosa oculta las manchas oscuras y la pigmentación iluminando la piel para un brillo saludable.
El trébol oculta el enrojecimiento causado por la rosácea, la inflamación, los brotes y la exposición al sol.
La caléndula disimula las ojeras, los hematomas y diversos tipos de hiperpigmentación.
Reflexiones finales
Con todos los increíbles beneficios que ofrece la cúrcuma en un solo ingrediente, es solo cuestión de tiempo antes de que se vuelva tan omnipresente en el mundo del cuidado de la piel como ya lo es en el mundo culinario.
